La creencia popular que un año de vida de un humano equivale a siete años de existencia en un perro es totalmente falsa. La variedad de razas perrunas hace imposible generalizar, así como la diferencia de tamaños. Con los gatos pasa algo muy parecido según lo explica la medicina veterinaria.
Lo cuenta Jesse Grady en The Conversation, haciendo énfasis en recordar que por mucho tiempo se ha mantenido el mito por los dueños de mascotas, que un año de la vida regular es el equivalente a siete en los perros y gatos.
Lo cierto y concluido de este axioma es que el estado general de salud de la mascota puede influir en la determinación de la edad real para bien o mal del mismo, solo conjeturadas por el veterinario cuando examine a tu mascota y expida las recomendaciones sanitarias para el animal.
De hecho, los médicos ya aplican estos conceptos cuando se interpretan los resultados de exámenes de salud específicos sobre la edad humana. Al igual que un niño sano no necesita una colonoscopia, un cachorro normal no necesita controlar sus niveles de tiroides.
Pero una mujer adulta, probablemente necesitará de una mamografía regular, de la misma manera que una gata adulta necesitaría exámenes anuales para determinar los tipos de parásitos intestinales que la atacan. Por supuesto, estas pautas aumentan en función del examen de un médico o un veterinario del paciente, humano o animal.
Vigilar y controlar el estado saludable de tu gato de seguro que ayudará a mantenerlo en un peso ideal y con la energía para vivir las siete vidas o más que se presupone alcanzará en el tiempo de vida real de los humanos.
Comentarios
