En los dos últimos años, se produjo una merma promedio de “entre el 15 y el 20 por ciento” en pasajeros de los transportes escolares, en ese marco se encuadra una suba que, en lo que va del 2017, supera el treinta y cinco por ciento.
Alejandro Celas, vocal de la Unión de Transportistas Escolares de la provincia comentó, “El aumento estaba planificado desde principios de año porque era desdoblado. Fue un 15% en marzo y otro 20 desde el 1º de agosto”.
Algunos de los argumentos son “las subas de costos, de combustible, seguros y cuotas de los vehículos”. Al tiempo que remarcaron que su servicio es “el más seguro”, los empresarios afirman que debieron modificar “el prorrateo” por la menor cantidad de pasajeros, por lo que quienes continúen, pagarán más.
Comentarios
